Buenos Aires: donde comer según cada recorrido turístico

Los diferentes atractivos de la ciudad porteña se acompañan con buena gastronomía acorde a cada parada, por eso te traemos una crónica turística con sus opciones para aprovechar el recorrido gourmet

Buenos Aires, la ciudad de nunca duerme ofrece una variada gastronomía entre sus principales atractivos. Su diversidad invita a descubrirla en todas sus facetas y cada sitio tiene su propia identidad.

Un fin de semana de Buenos Aires, recorrimos sus sitios más recónditos entre los que visitamos Recoleta, San Telmo, Palermo Soho, Palermo Hollywood, La Boca y las cercanías de Plaza Mayo. En este tour, por supuesto nos encontramos con cada atractivos turístico de la ciudad porteña como el Obelisco, el Puente de la Mujer, el Planetario y la Floralis Genérica, la maravillosa escultura metálica en la Plaza de Las Naciones Unidas, una obra artista de 23 metros de alto con un espejo de agua al pie de 44 metros en medio de un parque donde se puede descansar en reposeras pensadas para los visitantes. La sofisticada avenida Figueroa Alcorta alberga sitios para beber un coctail o comer algo con precios acorde al lugar aunque sorprenden tragos por $1200.

El Puente de la Mujer, increíble atractivo de esta ciudad se vislumbra en el Paseo Puerto Madero donde las luces se acoplan con la mística del paisaje para brindar un cuadro perfecto en medio un centenar de sitios para vivir una cena perfecta. A pesar de que parece costoso, existe una gama de restaurantes que van desde los más snob hasta comida rápida. Llama la atención en el medio del dique el patio cervecero Peñón del Águila, en una plataforma móvil que funciona como bar con música y una carta sencilla de burgers a $2700, cerveza tirada y una interesante movida joven con el famoso puente de fondo.

Recoleta es el barrio donde la elegancia tiene nombre y nos encontramos con el restó de Germán Martitegui denominado Marti, una puerta blanca que se abre a una sitio que parece un patio interno con una inmensa barra en el medio y en los costado aloja un invernadero de plantas gigantes que por un momento hacen te invitan a olvidar la city porteña. La cocina vegetariana ofrece platos de autor sencillos con una panificación notoria. Las entradas son panes de diferentes texturas y sabores con pasta y mousse que tiene un valor $1500 mientras los platos principales son composiciones entre ellas tomate,tomillo y parmessano y tiene un valor de $2500.

En las cercanías, es inevitable no hacer parada en Don Julio o La Cabrera, dos parrilladas premium de Buenos Aires ubicadas en Palermo, calificadas entre los mejores restuarantes de Latinoamérica. La carne brilla como la estrella y los cortes de bife de chorizo, ojo de bife o entrañas se califican en otra dimensión. Los valores oscilan en $10,000 por persona con entrada, principal, postre y vino. La pizza porteña también suma en el tour gastronómico, un sitio ideal para conocer en Palermo es Pizza Paradiso en calle Sucre, del reconocido chef Donato De Santis, donde la masa se puede pedir a la napoletana tipo fina o a la romana tipo gruesa y cuadrada. Las dos opciones son valederas ya que sus productos son excepcionales.

En La Boca, hay que comer un “chori” porque el sitio lo demanda. No hay un sitio preciso para hacerlo pero en Caminito todos los reductos son apropiados para esta parada obligada. Sin embargo, en San Telmo, el sitio perfecto para disfrutar de un almuerzo muy porteño es el Mercado de San Telmo que data de 1891. Recientemente remodelado es un lugar que conserva la esencia con estructuras metálicas y un ambiente popular mientras ofrece una gastronomía al paso bien definida y de calidad. Un recomendado en el Mercado de San Telmo es Bar de Pinchos, donde sirven en barra brochettes o carnes de cortes tradicionales con verduras asadas a la chapa y a la vista, una experiencia grata para el turista ($2500 por plato)