Vuelve la Semana de la Moda de Mánchester

Tras una pausa de diez años, retoma este gran evento de la moda internacional pero con un enfoque centrado en el desarrollo sostenible

Mánchester quiere volver a ocupar un lugar destacado en el mundo de la moda. Tras haber acogido en los últimos años desfiles de Chanel y de Fila con Haider Ackermann al mando, esta ciudad del norte de Inglaterra – la cual supo ser considerada como la capital de la industria textil en el siglo XIX conociéndola como “Cottonopolis” por producir la mitad del algodón mundial-, busca reafirmar su vínculo con la moda relanzando la Semana de la Moda de Mánchester.

Así, y tras una pausa de diez años, anunció su regreso con un nuevo equipo y dirección, y con un enfoque centrado en el desarrollo sostenible. El evento tendrá lugar durante tres días, del 9 al 11 de septiembre, justo antes del maratón de las cuatro “grandes” Semanas de la Moda de Nueva York, Londres, Milán y París y su centro neurálgico será Campfield, los antiguos pabellones del mercado de Mánchester, situados en el centro del nuevo distrito de St. Johns, que han sido renovados y transformados en un centro dedicado a las nuevas empresas tecnológicas y creativas.

En este sentido, la Semana de la Moda de Mánchester se celebró por primera vez en la ciudad a principios de la década de 2010, pero solo duró unas pocas ediciones. Al mismo tiempo, entre 2022 y 2024 se celebró otro evento llamado Northern Fashion Week.

«El evento estará liderado por figuras influyentes del sector, entre ellas Carry Somers, cofundadora del movimiento Fashion Redvolution y Safia Minney, pionera de la moda sostenible y fundadora de la marca ética People Tree», según informaron los organizadores en un comunicado. También señalaron que la productora ejecutiva de esta edición de la Semana de la Moda de Mánchester es Gemma Gratton, que cuenta con más de veinte años de experiencia en ventas y gestión de proyectos. Además, esta semana de la moda cuenta con el respaldo de la plataforma mediática y consultora en sostenibilidad Eco -Age.

«Mánchester siempre ha estado a la vanguardia, ya sea en música, fabricación o movimientos sociales. Ahora es el momento de volver a la vanguardia y construir el futuro de la moda desde los cimientos. La Semana de la Moda de Mánchester no es solo una celebración del estilo, sino un catalizador cultural para las personas, el propósito y el progreso», afirmó Gemma Gratton, cofundadora del Movimiento de la Moda de Mánchester en 2019 para concienciar sobre los efectos nocivos de la sobreproducción de ropa y que lanzó la marca ética The Bee Thrive.

La Semana de la Moda de Mánchester reunirá a marcas establecidas y diseñadores emergentes, según han adelantado los organizadores, aunque sin dar más detalles del programa. Más allá de los desfiles de pasarela, el evento «destacará el patrimonio y el futuro, la salud y el bienestar, la tecnología y la innovación, fusionando la moda con la innovación responsable», a través de mesas redondas, exposiciones y experiencias interactivas.

Es interesante destacar que la historia previa de la Semana de la Moda en Mánchester, aunque breve y discontinuada, dejó una huella significativa en la escena local. La edición de principios de la década de 2010 sirvió para visibilizar el talento y el potencial de una ciudad que, en aquel momento, buscaba redefinir su identidad en el contexto de un sector cada vez más globalizado. La existencia de otra iniciativa, como la Northern Fashion Week, entre 2022 y 2024, evidenció un interés continuado en mantener viva la tradición y explorar nuevas formas de hacer moda en el norte de Inglaterra. Sin embargo, la reintroducción formal de la Semana de la Moda de Mánchester bajo un enfoque renovado confirma un compromiso más ambicioso y estructurado, con la ambición de posicionarse como un evento de referencia en el calendario internacional, no solo por el despliegue de pasarelas, sino también por su visión estratégica que combina cultura, sostenibilidad y tecnología.

Para entender en profundidad la importancia de este evento, hay que considerar también el contexto socioeconómico y cultural en el que se desarrolla. Inglaterra, y en particular Mánchester, atraviesan un proceso de reconversión económica y social que requiere innovar en sus sectores tradicionales e identificar oportunidades en ámbitos emergentes. La moda, con su capacidad de generar empleo, atraer inversión y promover visibilidad internacional, se convierte en un catalizador clave para esa transformación. La apuesta por el desarrollo sostenible y la innovación, juntamente con la cultura local, puede ofrecer a Mánchester un perfil diferenciado dentro de las ciudades europeas con tradición en diseño y moda, como Londres o Milán.