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Colores y emociones: ¿cómo se relacionan entre sí?

En su segunda entrega, la columnista de Voilà, Carla Masi, explica cómo usar el color a favor de lo que sientas y quieras transmitir

Como hemos podido ver, el llamado ‘lenguaje del color’ es conocido por profesionales del marketing o de la decoración e incluso por artistas, y la psicología del color es necesaria para la elaboración de productos, como ropa, publicidad, etc. Asimismo, en nuestra nota anterior, pudimos ver cómo la paleta de colores puede incidir en nuestras emociones.

A continuación, veamos cómo lo hacen tanto a nivel mental como físico.



Desde lo Mental

Percibimos los colores de forma visual pero automáticamente el historial emocional que tenemos cada ser humano, los relaciona con algún momento de nuestra vida. ¿Te has dado cuenta de por qué tal o cuál color te genera desagrado? ¿Podrías reconocer a qué momento “emocional” de tu vida lo estás asociando?

Antes que nada, debemos estar dispuestos a experimentar los colores  antes de ‘juzgarlos’. Para ello, veamos algunos conceptos que te ayudarán sobre los colores básicos:

Azul

El azul te servirá para estructurar tus ideas, gestionar tu tiempo y también para ‘bucear’ en conceptos que te parezcan difíciles o incluso, profundizar emocionalmente en tus sentimientos si se sentís atascado. También relaja y provoca confianza en los demás; aunque no sea cálido, es el color favorito de la mayoría de la población mundial según un estudio de «Psicología del Color» de Eva Heller.



Rojo

Por su parte, el rojo servirá para ‘ponerte en acción’, conectar con la voluntad y un extra de energía cuando la necesites. También para encender tus emociones o salir de la apatía. Es un color poderoso. Recordá usarlo inteligentemente.



Verde

El verde es un color que sirve para crear. Es uno de los tonos más nobles a la hora de combinar, lo vemos puramente en la naturaleza… ¡qué más para saber lo funcional y noble que es! ¿Un tipo? Aprendé a ver las sutilezas de la naturaleza para saber como combinar colores.




Negro

El negro te servirá para tomar decisiones, subir tu autoridad personal, buscar aspectos críticos o límites de una situación o separar en partes más pequeñas de problemas que parecen no tener solución.




Amarillo

Por último, vemos que el amarillo te puede servir para buscar soluciones positivas y optimistas ante escenarios poco alentadores. También para conectar con las personas y la alegría.



Desde lo Físico

Para resumir, cada color tiene una vibración y esto afecta al campo electromagnético de nuestro cuerpo influyendo en las sensaciones y emociones.

Por eso es que el color que elegimos vestir afecta directamente en cómo sentimos y pensamos para luego actuar desde esa emocionalidad. Esto no significa que porque más de una vez que vistas de negro de arriba abajo acabarás sintiéndote mal, pero sí que recuerdes el impacto tiene en vos y en otros el uso excesivo de determinado color.

Conectarnos con el color desde lo intuitivo y lo emocional nos permitirá estar más en armonía con nosotros mismos. Así es que si miramos a nuestro alrededor, lo que usamos, la decoración de nuestra casa o incluso la comida que elegimos cada día, podemos ver qué colores están más presentes en nuestra vida.

Imaginemos que tomamos una linterna con nuestras manos y alumbramos hacia tu interior: ¿qué sientiríamos? ¿de qué color sería ese interior?



Te puede parecer  una locura pensarlo de esta manera, pero internamente, nuestro inconsciente también se expresa en color. Nuestro hemisferio derecho se encarga de asociar estados emocionales a colores. De ahí que en el imaginario colectivo encontremos listas y listas de significados del color.

En el fondo, el color es una interpretación subjetiva y además de ‘ponértelo’ fuera, dentro de nosotros, también se expresa y habla de nuestro inconsciente, de eso que ‘no decimos’.

Recordar que la imagen personal es el lenguaje del inconsciente, es esa carta de presentación de quién somos y cómo queremos mostrarnos al mundo y el color su parte más abstracta y misteriosa, a su vez la más efectiva.


Por: Ana Carla Masi, mentora y asesora de imagen. IG: @soycarlamasi

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